Caminan a carcajadas
y sus dos arcos invitan al placer,
sus luces robóticas completan
a una soberana de picardía seductora y
a mí solo me estremecen.
¿Cómo es que exudan placer
comiendo de lo mismo
que a mí me produce pesar?
Debo ser la versión melancólica
de un robot trans…