Una comedia cruel
donde se presta de bufón,
los colores son malignos
e invaden una silueta
transformada en humor.
Perfectas defensas para el miedo al rechazo.
Cada defecto imposibilitador
de aceptación externa
es compensado desesperadamente
con la risa,
en esta cruel fórmula auto aplicada,
un chiste inteligente es equivalente
al miedo más profundo al juicio social.
Sus fluidos emanan teñidos de brillo,
se vuelven diamantes valiosos.